El día de ayer el Gobierno Nacional anunció la modificación del Artículo 9 del Decreto 538 de 2020, que obliga al talento humano en salud a prestar sus servicios con ocasión de la pandemia por el COVID-19. Esto en respuesta al rechazo que generó el decreto entre gremios y asociaciones médicas pues muchos profesionales, no cuentan a la fecha con los elementos de protección necesarios para enfrentar la crisis sanitaria.
Debido a la intermediación y el rechazo absoluto por parte de las agremiaciones médicas, entre ellas la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación, quien denunció ante diferentes medios de comunicación las implicaciones y vacíos del decreto; en horas de la noche el presidente del Colegio Médico, Roberto Baquero anunció que el Ministerio de Salud se comprometió en hacer una reglamentación en la que quede claro que el llamado a preparación y disponibilidad para la atención de la pandemia, con carácter de obligatoriedad, se hará solo en caso de que la crisis lleve a la falta de personal de salud y se realizará de manera escalonada de acuerdo con la evolución de la pandemia.
Baquero también afirmó que, según lo acordado con el MinSalud, el personal que sea llamado será previamente entrenado y contará con la dotación de bioseguridad necesaria, además que, ante las denuncias por las condiciones de bioseguridad de los trabajadores, se aclaró que los primeros responsables de entregarlos son los empleadores, con apoyo de los administradores de riesgos laborales.
A pesar de que algunos sectores celebraron la voluntad de los cambios anunciados frente a las dudas generadas por el decreto, los gremios médicos continúan a la espera de la reglamentación y las medidas que tomará el Ministerio de Salud para que efectivamente las posiciones anunciadas queden doumentadas formalmente y, más allá de su expedición, sean garantes del cumplimiento oportuno por parte de las entidades responsables. Más aún cuando a la fecha el talento humano en salud está atento a servir frente al llamado, pero siguen persistiendo las deficiencias en la entrega oportuna de los elementos de protección necesarios para tal fin y en condiciones de trabajo justas, dignas y decentes.
La Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación se manifestó frente al Decreto 538 al considerar que sus disposiciones son insuficientes. Para consultar el comunicado haga clic aquí.