El fallecimiento de los doctores Carlos Nieto y William Gutiérrez el pasado sábado 11 de abril a causa del Covid-19, enlutó tristemente al país y reafirmó una vez más la apremiante necesidad de proteger el bienestar de todo el talento humano en salud que atiende la crisis sanitaria.
La Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación S.C.A.R.E, y el Fepasde lamentan profundamente el fallecimiento de los dos profesionales de la salud, que dieron su vida en medio de la lucha para la contención de un virus fácilmente propagable.
Carlos Fabián Nieto doctor egresado de la Universidad Corporativa de Villavicencio de 33 años quien no tenía comorbilidades, tras presentar síntomas, el martes 31 de marzo dio positivo para Covid-19, su estado de salud era crítico, y contaba con apoyo respiratorio, sin embargo, tras 11 días combatiendo por su vida, el virus le ganó la batalla en la unidad de cuidados intensivos de la Clínica Universitaria Colombia, lugar en el que trabajaba al centro de la ciudad; el médico general fue despedido en la tarde del sábado como un héroe en medio de aplausos y una calle de honor precedida por colegas, familiares y compañeros.
Sin embargo, las noticias lamentables que enlutaron el sector salud, no terminaron ahí y a las 7:00 p.m. del mismo día, se confirmó la muerte del Dr. William Gutiérrez, médico anestesiólogo e intensivista de 59 años, que trabajaba como jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos del Centro Médico de Olaya, quien tras ser diagnosticado se encontraba en hospitalizado en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Militar en Bogotá, convirtiéndose así en el segundo mártir de la pandemia, un esposo, padre, hijo, hermano y excelente profesional víctima de la enfermedad ante la cual directamente y en su calidad de médico clamaba a los habitantes permanecer en sus casas para evitar la propagación masiva.
Frente a las lamentables noticias el Ministro de salud, Fernando Ruiz, señaló en canales nacionales que ambos profesionales sufrieron contagio fuera del ámbito laboral, » Estamos enfrentando un fenómeno que en el mundo cobra las vidas de muchas personas, entre ellos los trabajadores de la salud» agregó.
Los lamentables hechos sientan un precedente para que se tomen acciones claras y oportunas que garanticen la salud de nuestro talento humano en salud, porque no queremos que nuestros héroes mueran como víctimas tras la falta de garantías a sus derechos fundamentales.